Se sancionará severamente Toda operación de expedición en el extranjero la ha informado la administración general de las aduanas encargada de la aplicación de estas medidas destinadas a mantener la estabilización de los precios después de los recientes “motines del hambre”
Radio Kiskeya
Por medio de la administración general de las aduanas (AGD), el Gobierno declaró lunes “esta formalmente prohibida, en cualquiera de sus formas” la expedición en el extranjero de arroz procedente de Haití con el fin de impedir toda subida artificial de los precios del cereal en el mercado local.
En un comunicado firmado por su Director General, Jean-Jacques Valentin, la administración de las aduanas destaca a la atención de los comerciantes y exportadores que estas medidas se adoptan de acuerdo con las instrucciones del Ejecutivo.
“Ninguna exportación destinada a desviar de sus objetivos las medidas adoptadas con el fin de hacer bajar el precio del arroz en el mercado nacional se tolerará”, avisan las autoridades aduaneras. Se pasaron instrucciones en consecuencia a las oficinas de la administración y a sus brigadas de vigilancia.
La AGD amenaza con aplicar las disposiciones del código aduanero relativas a la “represión del contrabando de todo tipo”. Detendrá, juzgara y se castigará a los contraventores de acuerdo a los artículos 227 a 245 del código. Por fin, la administración de las aduanas recuerda que su intervención se inscribe en el marco de su “misión de protección”.
Esta “misión de protección” de las Aduanas haitianas estaría en relación con la existencia en República Dominicana de un potente circuito de importación o drenaje del arroz disponible en Haití, se aprendió en los círculos financieros.
Estas nuevas medidas siguieron de algunos días el anuncio de la caída del precio del arroz, el elemento básico de la alimentación popular cuyo encarecimiento había desencadenado, hace menos de dos semanas, violentas manifestaciones con las consecuencias desastrosas para la economía y la imagen del país.
En los mercados públicos, se respeta mas o menos, la reducción del 15% concluye entre el Presidente René Préval y algunos importadores que hizo pasar el saco de arroz de 55 kilos de 51 a 43 dólares. Pero, este acuerdo no irá más allá de un período muy corto de un mes.
En paralelo, los precios de varios otros productos alimentarios como la harina y el aceite de cocina flamean en el mercado haitiano, causando profundas inquietudes en los consumidores que, en su mayoría, disponen de un poder adquisitivo poco importante. La crisis alimentaria sin precedentes que conoce Haití causó múltiples intervenciones de la comunidad internacional también preocupada por la tendencia a la universalización del fenómeno. spp/Radio Kiskeya
http://www.radiokiskeya.com/spip.php?article4949
Nuestros comentarios:
¡SI ustedes son como yo y que leen este despacho con una sospecha de lógica, se dirán pero esto no son posible! Caray pero sí en Haití todo es posible, nada no es imposible. O mejor nada no es posible todo es imposible. Sería en efecto, difícil imaginar que en esta coyuntura caracterizada por la existencia de una hambre endémica que amenaza la estabilidad política del país que pueda existir un tráfico de productos alimentarios hacia la República Dominicana un país que constituye el granero normalmente del país en materia de productos alimentarios, resultante de su casi autosuficiencia.
Pues sí. Con todo el respeto que merecen los puritanos, estos circuitos existen. Los haitianos venden nuestro café a la República Dominicana, los haitianos venden carbón de madera a la República Dominicana mientras que los dominicanos supervisan desde los aires la presencia de los hornos a carbón para controlar el corte peligroso de los árboles. ¡Nosotros los haitianos con menos de un 2% de cobertura vegetal nosotros no limitamos a “deguayantar” lo que nos queda para nuestro uso personal pero exportamos el carbón de madera hacia la República Dominicana!
Volvamos de nuevo al problema del arroz. El Gobierno hace bien de mencionarlo que existe un tráfico de arroz o que existe el riesgo de que este tráfico tenga lugar. Este tráfico se referiría al arroz subvencionado por las ayudas del estado y las organizaciones internacionales. Y si se saca “el hueso del gombo” se encontrará de potentes y muy conocidas manos detrás de este crimen odioso. Los que sólo piensan en el afán de lucro prostituirían hasta sus propias madres. El que se agarre involucrado en el trafico del arroz subvencionado hacia República Dominicana debe ser procesado como un criminal de derecho común y eso llame como se llame.
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