“No política de subvención de los precios de los productos importados”, responde René Préval a las personas denunciando la carestía de la vida

La policía previene que no tolerará ya el desorden.
Jueves 10 de abril de 2008, Radio Kiskeya.
El Presidente René Préval hizo miércoles un llamamiento a la calma a las poblaciones de varios departamentos geográficos del país que manifiestan con violencia desde una semana contra la carestía de la vida. “Las violencias no harán bajar los precios. Al contrario, los harán aumentar ", ha dicho.
El jefe del Estado rechazó inmediatamente toda política de subvención de productos importados sugerida por distintos sectores favorables a la baja de los precios de los productos de primera necesidad. “Esta política, aplicada desde hace ahora 20 años en el país, es la causa de los problemas actuales”, sostuvo.
Haciendo hincapié en el hecho de que el alza actual de los precios en Haití se inscribe en un marco mundial de subida de los precios, dio el ejemplo de numerosos países donde las poblaciones manifiestan actualmente contra la carestía de la vida.
Para hacer frente a los problemas de Haití, René Préval afirma haber optado en favor de una política de subvención para la producción nacional. En este marco, el Estado subvencionará los abonos, permitiendo a los agricultores obtenerse a mitad precio, o a un menor coste.
La comercialización del arroz local también se subvencionará, anunció. Se crearán algunos centros de distribución y las rentas así generadas permitirán aumentar la producción de arroz hasta la autosuficiencia en la materia.
El Estado se propone también impulsar la producción avícola nacional por una política de subvención conveniente, informa al Presidente Préval.
Otros problemas que tenían, en distintos grados, una determinada conexión con el costo de la vida, René Préval puso de relieve las iniciativas consideradas en materia de infraestructuras sanitarias, de transportes públicos, de carreteras. Anuncia en este sentido la rehabilitación próxima del Centro Nacional de los Equipamientos (CNE).
Para hacer frente a la crisis haitiana, Sr. Préval sugiere también a los empleados del Estado que perciben más de 30.000 calabazas de salario mensual conceder un 10% a programas en favor del desfavorecidos. Invita especialmente a la solidaridad social los de los empleados del Estado que recientemente se habían beneficiado un 35% de aumento de salario.
A los Ministros y altos funcionarios, pide reducir los gastos. A los contribuyentes generalmente cualesquiera, pide honrar sus obligaciones hacia el fisco con el fin de permitir al Estado disponer de los medios indispensables para sus intervenciones sociales.
A nivel político, el jefe del Estado anuncia la apertura del Gobierno y el Estado en general a la participación, dejando oír, que tal como ocurre con la coalición gubernamental formada inmediatamente después de su acceso a la Presidencia, otros sectores podrían llamarse “con el fin de sentar mejor la estabilidad”.
En cuanto al Gobierno, el Presidente Préval, que no se pronunció en favor de su devolución, más bien consideró que había venido quizá “el momento de evaluarlo”. Saludando el trabajo realizado por la policía nacional y los cascos azules de la ONU, el Presidente Préval intimó a los instigadores de los disturbios “el orden” de cesar las violencias. “La policía y la población no van a seguir tolerando el desorden”, declaró. Por fin presentó sus simpatías a los que registraron pérdidas materiales y condolencias a los cuyos prójimos han perdido la vida en los incidentes de estos últimos días. [jmd/RK]
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