Una conspiración por el bien de Haití

En el rancho Le Moncel , el prolifico escritor haitiano Frankétienne anuncia el ciclo del despertar, del renacimiento de Haití. El calvario de este país duró demasiado. El tiempo llegó para Haití, tierra de libertad, de enderezarse.
“Muy a menudo se ha hablado de conspiraciones y conspiración para las cosas negativas. Para matar a alguien, derrocar un Jefe de Estado. Vamos todos a conspirar por el bien de Haití”, declaroo Frankétienne, el prolífico escritor haitiano. Abogó, ayer domingo, en el Rancho el Montcel, por una extensa conspiración para el desarrollo de Haití.
Franketienne observa la República como un enfermo que los médicos se niegan a curar. “El enfermo ni se sana ni se meure. Es la permanencia de la asistencia endémica que se convierte en una fuente de ingresos”. Califica esta actitud malsana por parte de los que gritan bajo todos los techos que ayudan Haití.
Anunció que Haití ha alcanzadoel ciclo del despertar y de la salvacion de una tierra que ha estado pagando durante milenios. ¡“Este calvario ha durado demasiado! ”, martilló Frankétienne.
Estos últimos años, ha confiado, observó la aparición de varios grupos de reflexiones. Desea que los miembros de estos grupos compartan sus reflexiones y sigan afirmándose positivamente para que cese la cultura del fracaso. “Desde más de dos siglos, conocemos el síndrome del fracaso y el fracaso” que hace que se ha dejado de sentirse orgulloso de ser Haitiano, se aflige. Citando al escritor martiniqueño, aimé Césaire, recordó que “Haití es la tierra donde la libertad se puso de pie por primera vez. »
El escritor considera que la restitución de Haití en una esfera de dignidad, productividad y rentabilidad llegará a romper esta tradición de fracaso.
La lógica del caos.
“siempre se ha dicho que Haití representa al arquetipo esencial del caos. Ahora bien, durante mucho tiempo, la enseñanza académica nos ensenó a tener miedo del caos. Crecimos en una cultura del miedo”, criticamos al escritor para quien “el caos es la matriz invisible de las profundidades esenciales. ” Por eso consideró la exposición de la pareja Mathurin sobre el tema “Patrimonio geológico de Haití, las riquezas de su sótano y sus aguas territoriales” como un enfoque moderno donde se agarra todo con arte y racionalidad.
Avanzando en la lógica del caos, Frankétienne considera que Haití es una tierra enigmática que tiene la forma de esfinge. Para el escritor, el esfinge tiene en él, los gérmenes de la duda que suscita la reflexión, una actividad intelectual que lleva al ciudadano “que debe encontrarse la luz a través de misma de los bosques tenebrosos. “Haití es tierra de luz a pesar de lo que nos pasa nosotros”, sostiene.
Compartiendo las mismas ideas que el par Mathurin, Frankétienne invita a la gente “a una prospección de las cavernas del imaginario haitiano que constituyen la primera fuente de todas las riquezas. »»
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