El jefe del Estado haitiano, René Préval, regreso a Gonaïves ayer jueves con el fin de constatar la amplitud de los daños causados por los recientes ciclones. A bordo de un camión, el Presidente Préval recorrió varias calles de la ciudad aún enterradas por el lodo.
Temiendo la llegada de otros ciclones, Sr. Préval cree que es necesario definir una estrategia para proteger la ciudad y destaca que trabajos deben realizarse en los lechos de los ríos para alejarlos de la ciudad. “Es necesario que los ríos no pasen ya en la ciudad”, ha dicho precisando que la repoblación de las cuencas vertientes es un programa a largo plazo.
Preguntado sobre su visita tardía a Gonaïves, el jefe del estado indicó que en primer lugar había solicitado fondos de la comunidad internacional en favor de los siniestrados. Señalando que la situación económica era ya difícil antes de las inclemencias, Sr. Préval dice reconocer que se muere de hambre la población.
Invitó al alcalde de Gonaïves a explicar a la población los esfuerzos realizados para ayudar a los damnificados. “Hay 45 camiones del CNE que ayudan a la limpieza de la ciudad”, ha dicho anunciando el desembolso de 31 millones de gourdes para la realización de trabajos de saneamiento que permitirán crear empleos.
En su intervención, el alcalde del Gonaïves, Stephen Moïse, pidió al jefe del estado adoptar disposiciones urgentes para limpiar la ciudad. “Es necesario acciones para reconstruir Gonaïves”, ha dicho recordando que la población vive en el lodo desde un mes.
Describiendo su incapacidad a responder a las necesidades de la población, el alcalde de Gonaïves solicitó la ayuda de varias agencias con el fin de distribuir la ayuda alimentaria a los siniestrados.
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