El presidente del Banco Mundial, Robert B. Zoellick, afirmó que Haití tiene un gran potencial para las inversiones del sector privado, dado que su geografía puede ser una oportunidad estratégica para el vecino país, situado a mil kilómetros de los Estados Unidos.
En un trabajo suyo al que tuvo acceso este diario, calzado bajo el título “ En Haití el Progreso es Posible”, Zoellick señaló que ya habido casos de éxito, y se refirió específicamente que brazo para el sector privado del Banco Mundial, la Corporación Financiera Internacional, ha invertido en Digicel, transformando la cobertura de los teléfonos celulares en el vecino país.
También indicó que una zona franca cercana a la frontera con la República Dominicana atrajo a varios fabricantes de ropa norteamericanos, creando así miles de puestos de trabajo.
Zoellick resaltó el hecho de que a través del acceso a ese mercado a través de la ley HOPE II de los Estados Unidos, Haití puede crear trabajos en el sector de la vestimenta y la agricultura y promocionar a su sector privado mediante la creación de un ambiente propicio para las inversiones y la mejora de la infraestructura.
Zoellick considera que la reconstrucción de Haití requerirá de un compromiso a largo plazo.
“Cuando las cámaras de televisión se vayan los donantes no deben partir con ellas. En el pasado, el “cansancio con Haití” fue un obstáculo para el desarrollo comparable con los desastres naturales”, expresó.
Al referirse a las lecciones de deben ser aprendidas, Zoellick sostuvo que los donantes deben trabajar de la mano del gobierno y pueblo haitianos. Asimismo, consideró que el gobierno y el Parlamento deben mostrar su liderazgo y su compromiso para trabajar de forma conjunta.
Planteó que la asistencia a Haití debe ser en forma de donaciones, conectadas a los objetivos haitianos y a crear capacidad local, aun cuando los primeros trabajos dependan de socios regionales e internacionales. También dijo que debe ser eliminado el peso de la deuda externa.
Recordó que el año pasado, junto al FMI el Banco Mundial canceló USS1200 millones de deuda.
Sin embargo, señaló que aun faltan casi mil millones de dólares adicionales.
Explicó que la deuda con el Banco Mundial representa menos del 4% de esa cifra – unos US$38 millones. El Banco Mundial anunció que no habrán vencimientos de deuda durante los próximos cinco años, y que trabaja en la cancelación del resto de la deuda.
Título
Zoellick resaltó que “necesitamos de una ayuda más coordinada, menos proyectos para que los donantes se sientan bien consigo mismos, más supervisión, transparencia y rendición de cuentas para generar confianza de que el dinero será utilizado efectivamente”, expresó. Dijo que se puede respaldar la transición entre la ayuda humanitaria y la reconstrucción a través de un sistema de alimentos o efectivo a cambio de programas de trabajo.
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