Sindicalistas resignadas a aceptar una modificación de la nueva ley sobre el salario mínimo

Varios dirigentes de organizaciones sindicales se declararon listos a una reducción hacia una rebaja del salario mínimo de 200 gourdes votado por el Parlamento. Durante un encuentro con los miembros de la comisión asuntos sociales de la Cámara Baja, los dirigentes de la Coordinación Sindical, de la Confederación General de los Trabajadores (CGT) y del sindicato de CODEVI hicieron hincapié en la necesidad de evitar despido masivos que resultaría de la subida del salario mínimo.
Etienne Romain, representante del sindicato de CODEVI a Ouanaminthe mantuvo que los sindicalistas tienen por misión de procurar que los obreros conserven su empleo. Asustado por las amenazas de los dueños, de Sr. Etienne se pronunció a favor de la aprobación de una disposición que no implicará un aumento de la taza de desempleo. No obstante durante el encuentro las sindicalistas alegaron que incluso un salario mínimo a 200 gourdes no permitiría a los obreros cubrir sus necesidades fundamentales.
Etienne Romain reveló que el salario mínimo a Ouanaminthe es de 125 gourdes desde un año. La propuesta del jefe del Estado no aportará pues nada de nuevo para los obreros de CODEVI. Para el representante de la CGT, los protagonistas se encuentran enfrentados a un dilema puesto que deben elegir entre desempleo y desempleo disfrazado.
En el contexto del aumento del salario mínimo el Estado debe adoptar medidas complementarias tanto para el sector patronal como para la clase obrera.
Los dirigentes sindicales desean la continuación del diálogo entre los distintos protagonistas con el fin de encontrar un consenso sobre el salario mínimo.
LLM
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