El técnico de la selección francesa de fútbol, Raymond Domenech, cuenta con dos sistemas tácticos para elegir antes del debut de su equipo en el Mundial frente a Uruguay el viernes en Ciudad del Cabo, pero el problema es que ninguno de los dos le ha funcionado realmente bien.
Domenech, quien será reemplazado por Laurent Blanc tras el Mundial y tiene mucho que demostrar en Sudáfrica, ha dejado de lado en los duelos de preparación su cautelosa formación 4-2-3-1 para implementar un audaz 4-3-3, un sistema donde sus principales armas de ataque son dos extremos y un centrodelantero.
Muchos hinchas franceses han pedido que su selección juegue ofensivamente, ya que tiene una amplia gama de futbolistas creativos.
El intento parecía prometedor al principio, cuando Francia, que había decepcionado a sus seguidores con flojas actuaciones en los últimos dos años, logró un triunfo 2-1 sobre Costa Rica.
Con Jeremy Toulalan jugando delante de la defensa como centrocampista de contención, Nicolas Anelka, en lugar de Thierry Henry como centrodelantero, y Franck Ribéry y Sidney Govou en calidad de extremos, Francia se vio frágil en la parte posterior, pero creó buenas oportunidades de ataque.
"El sistema ofrece soluciones interesantes desde el principio, pero tiene su lado negativo y es que no da muchas garantías defensivas", reconoció Domenech.
El ex futbolista francés Guy Roux comparte la opinión del entrenador de Francia: "Parecía muy bueno", dijo Roux, quien dirigió al Auxerre francés durante décadas y siempre envió un 4-3-3 al campo de juego. "Pero defensivamente (...) yo no diría que fue un buen comienzo", agregó el técnico ya retirado, quien en la Copa del Mundo será comentarista de televisión.
Vergonzosa derrota
Lamentablemente para los aficionados, el empate 1-1 ante Túnez y la embarazosa derrota 1-0 ante China sugirieron que el nuevo sistema tal vez no era tan buena idea después de todo.
Sin embargo, el escenario más probable es que Domenech seguirá con el nuevo sistema 4-3-3, aunque sólo sea por coherencia y para beneficiarse de la labor realizada durante los amistosos de preparación.
"Nos damos cuenta que tenemos mucha puesta a punto por hacer y poco tiempo para hacerlo", dijo a periodistas el mediocampista Alou Diarra. "No podemos decir que hemos mejorado en los juegos de preparación (...) Todavía necesitamos tiempo para adaptarnos [al nuevo sistema] y no queda mucho", agregó.
Francia, que fue eliminada pronto de la Eurocopa 2008, necesitó de una polémica victoria en una repesca ante Irlanda para ganarse un boleto a Sudáfrica. Por esto, muchos piensan que no tiene mucho que perder al continuar con el 4-3-3 y bien podría intentar algo diferente.
El Grupo A lo integran además el anfitrión Sudáfrica, Uruguay y México.
http://www.elmundo.es/mundial/2010/2010/06/08/grupoa/1276020339.html
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