Dpa.- Ciudad del Cabo Después de cuatro Mundiales como jugador y como entrenador, el seleccionador de México, Javier Aguirre, sabe que la línea que separa el éxito del fracaso es muy fina. Por eso su apuesta por un estilo para Sudáfrica 2010 es irrenunciable: tener la pelota y formar un grupo unido. Nada de especular, nada de contraataque. "Toda proporción guardada, somos un equipo al que le gusta tener la pelota como España", aseguró en una entrevista.
México no lo tendrá fácil en Sudáfrica. Jugará el partido inaugural contra el equipo anfitrión en el imponente estadio Soccer City de Soweto, donde 90.000 espectadores alentarán a los 'Bafana Bafana' con sus atronadoras vuvuzelas. Después le esperan dos campeones del mundo, Uruguay y Francia, los otros dos componentes del duro Grupo A.
"Está abierto, no sé qué va a pasar", dijo tras el sorteo de grupos. Aguirre, de 51 años, es un hombre experimentado, "un motivador", como lo define su capitán, Rafa Márquez. Participó como jugador en México 1986, fue asistente en Estados Unidos 1994 y dirigió al "Tri" en Corea/Japon 2002, donde cayó en octavos de final ante Estados Unidos.
México nunca avanzó más allá de los cuartos de final, una barrera histórica que, según admitió el propio técnico, para escándalo en su país, resulta difícil de superar actualmente. Aguirre cree que es difícil para México dar el salto a la primera línea, a la de los "candidatos al título", como describió escuetamente a Brasil, Argentina y España.
Márquez ya advirtió sobre la principal deficiencia de México hace cuatro años en Alemania: "Falta un crack". "Entiendo la opinión de Rafa en su momento, pero la verdad es que a mí me gustaría que nosotros dependiéramos del conjunto", dijo Aguirre. "Yo prefiero no depender de uno solo".
Andrés Guardado o los campeones del mundo sub 17 en 2005, como Carlos Vela, Giovanni Dos Santos o 'Chicharito' Hernández, son la nueva generación de jugadores mexicanos, jóvenes que a diferencia de la mayoría de sus predecesores buscan hacer carrera fuera de México.
Eso sí, si pudiera no renunciaría ni al argentino Lionel Messi ni al portugués Cristiano Ronaldo, los dos grandes del momento. "Me llevaría a los dos, pero habría que vender todos los estadios para comprarlos", bromeó. Defensa rocoso en sus tiempos de jugador, de escaso trato con el balón, Aguirre cree sin embargo en un estilo de fútbol diferente para su segunda etapa.
"México tiene un estilo ya desde hace muchos años, es un equipo que depende mucho de la pelota, nos defendemos mejor con la pelota, la tratamos bien, no somos un equipo que sepa estar sin ella. No sabemos jugar al contraataque, nos somos veloces", explica. "No somos un equipo muy físico por cuestión de raza, pero sí resistente, aguantamos los 90 minutos a un bonito ritmo".
http://www.elmundo.es/mundial/2010/2010/06/10/grupoa/1276161604.html
Abrimos este espacio en 2007 cuando en Haití se hablaba también español debido a la presencia de los soldados latinos de la MINUSTAH. Una ventanilla de expresión hispánica para verse mejor . Después del 2010, el mundo hispano se ha acercado bastante a Haití. Sirvio para darse cuenta del distanciamiento de sus vecinos de culturas hispanas casi todas. Esta sigue abierta para recibir todos aquellos que quieran entender y ayudar a esta nación patrimonio de la humanidad.
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