CAGLIARI, Italia.- El papa Benedicto XVI declaró el domingo que está "cercano a toda la nación" haitiana y ora por las víctimas de los huracanes que "afectaron fuertemente" a Haití, causando 577 muertos y decenas de miles de damnificados, durante una visita a Cerdeña."Ante la vista de María, quiero recordar a la querida población de Haití, duramente puesta a prueba estos últimos días por el paso de huracanes", declaró el papa en la misa del Angelus en Cagliari, en Cerdeña, donde estaba de visita por el centenario de la patrona de esta isla al oeste de Italia.
"Ruego por las desgraciadamente numerosas víctimas y por los sin techo", añadió el papa ante decenas de miles de fieles reunidos ante la basílica. "Estoy cercano a toda la nación y espero que la ayuda necesaria llegue lo antes posible", añadió.
El papa, en visita pastoral de un día, había celebrado antes una misa al aire libre delante del santuario. El huracán Ike amenazaba el domingo con llegar a las costas de Haití, uno de los países más pobres del planeta, sumido en una crisis humanitaria después de tres tormentas en tres semanas, Fay, Gustav y Hanna, que dejaron miles de habitantes sin techo, sin agua potable ni alimentos.
Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, han muerto más de 500 personas por el paso de Hanna y el balance sigue aumentando "de hora en hora". Hace ocho días el huracán Gustav ya había dejado 77 muertos.
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