SANTO DOMINGO.- El jefe de la Policía Nacional, teniente general Bernardo Santana Páez, identificó ayer a Rafael Alexander Alejo Díaz, chofer del ingeniero Miguel Subero Domenech, como la persona que facilitó la entrada a los asaltantes que anteayer hirieron de bala al empresario luego de raptarlo en su villa ubicada en Casa de Campo, La Romana.
Santana Páez dijo que Alejo Díaz admitió haber participado en el hecho y está colaborando para identificar a los demás implicados en el caso. Reveló que el chofer está fichado en la jefatura por varios delitos, incluyendo robos.
El jefe policial sostuvo que el chofer, al ser una persona de confianza, tenía una tarjeta para entrar al Complejo Casa de Campo, donde mantuvieron la víctima amordazada por varias horas y luego salieron con destino a Santo Domingo en busca de más dinero.
Camino a la Capital, Subero Domenech fue desmontado del vehículo en que lo transportaban y llevado a uno de los laterales de la carretera de San Pedro de Macorís, donde le dieron dos balazos y fue dejado por muerto. Explicó que el ingeniero fue encontrado por guardias casacampestres, luego de haber caminado ocho kilómetros desde el lugar donde fue tiroteado.
Santana Páez informó que los hombres que penetraron a la residencia del ingeniero estaban fuertemente armados. Según el jefe de la Policía, Subero Domenech recibió dos disparos, uno que le rozó la cabeza y el otro le penetró por el cuello y se le alojó en la clavícula derecha, “por lo que fue dejado como muerto por los malhechores”. “Fue llevado a una clínica en La Romana, y posteriormente trasladado en helicóptero a la capital, donde fue ingresado en la clínica de Medicina Avanzada Doctor Abel González”, refirió Santana Páez. Anoche una fuente ligada a la familia informó que gestionaban trasladarlo al exterior, probablemente hacia Estados Unidos.
Conforme el jefe policial, los asaltantes llegaron a la residencia solicitando a la víctima la suma de US$300,000 que le había “tumbado” alegadamente a un amigo. “De esta forma los asaltantes intimidan a sus víctimas para que les den dinero rápido”, expresó. Miguel Subero, padre del ingeniero Subero Domenech, dijo que su hijo se encuentra estable, habla y permanece despierto en la sala de Cuidados Intensivos del referido centro de salud. Allegados a la familia dijeron sentirse sorprendidos por el grado de responsabilidad que la Policía atribuye al chofer de Subero, quien supuestamente lleva más de 10 años laborando para la familia.
Entretanto, el general Luis Dario de la Cruz Consuegra, jefe del Comando Regional Este de la Policía, con asiento en esta ciudad, informó que los delincuentes cargaron con cerca de 6 mil dólares, un reloj marca Rolex y una pistola marca Glock, propiedad de la victima. Precisó que están avanzadas las investigaciones para dar con los responsables del secuestro. Miembros de los organismos investigativos peinaron ayer toda la región en busca de los prófugos, mientras se confirmó el interrogatorio a Alejo DÏaz.
De acuerdo a las informaciones dadas a conocer por la Policía, Alejo Díaz regresó a la casa tras ocurrir el incidente y alegó que había sido objeto de disparos por parte de los secuestradores, versión a la que no dio crédito la Policía.
El general De la Cruz Consuegra adelantó que todos los indicios indican que el empleado tiene complicidad con los secuestradores y habría sido quien facilitó su entrada a la villa del ingeniero, debido a que por la rigorosa seguridad que se tiene en el hotel, sólo tienen acceso los dueños y residentes con un pase especial automático.
Policía recupera jeepetaLa Policía Nacional recuperó anoche intacta la jeepeta marca Lexus, sustraída al ingeniero Miguel Subero, quien fue secuestrado por tres hombres que lo balearon y dejaron por muerto en el batey 15 cerca de la comunidad de Guaymate, desde donde fue auxiliado por la Guardia Campestre. Anoche se confirmó el apresamiento de seis personas con relación al suceso, incluido el chofer del profesional que se tenía como confianza en la villa de la víctima, quien se repone en una clinica privada de dos heridas que recibió, una en la clavícula y otra en la cara.
El general Luis Dario de la Cruz Consuegra, jefe del Comando Regional Este de la Policía, confirmó que el vehículo fue encontrado intacto, abandonado a unos 500 metros del puente Mauricio Báez sobre el río Higüamo en San Pedro de Macorís. Dijo que se tomaron al vehículo las muestras de lugar en busca de las huellas dactilares de los delincuentes.
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