Los siete errores en la reconstrucción de Haití

28/03/2012 11:32 A.W. Berry
GlobalPost
 Más de dos años después del terremoto, los delitos violentos han aumentado y sólo una fracción de las personas desplazadas ha sido reubicada en residencias permanentes. Los fracasos en áreas como la ayuda económica y la logística han contribuido a la frustración generalizada en Haití.

Ayuda
De acuerdo con Naciones Unidas, se comprometieron 4.500 millones de dólares en efectivo para Haití en 2010 y 2011, pero a finales de 2011 sólo se habían desembolsado 2.380 millones de dólares.
Por otra parte, un informe de NPR dijo que los desembolsos en sí son un problema porque “la reconstrucción de Haití, al igual que casi todo lo demás en ese país, se ha privatizado, subcontratado, o ha sido asumido por las organizaciones no gubernamentales extranjeras”.
Una evaluación precisa y una planificación proactiva de los fondos prometidos podrían haber reducido las complicaciones financieras.

Organización 

Una mejor coordinación de los esfuerzos de asistencia de las muchas organizaciones involucradas para aliviar Haití podría haber rectificado la lentitud de la reconstrucción.
La Fundación de Naciones Unidas investigó este asunto y descubrió que la fragmentación de la información es una fuente clave de la disparidad de la comunicación dentro del esfuerzo de cooperación.
En otras palabras, tanto las organizaciones de cooperación como la Oficina Para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas no han podido diseñar con eficacia e integrar los sistemas de información de una manera que impulsase las acciones coordinadas.

Gobierno
Poco después del terremoto de enero 2010, el gobierno haitiano se debilitó a medida que lo hizo la población haitiana. Muchos edificios del Gobierno fueron destruidos, y se produjo la incapacidad administrativa. La acritud política dentro del gobierno haitiano también ralentizó el progreso.
La saga del Primer Ministro de Haití Conille Garry, quien renunció en febrero después de sólo cuatro meses en el cargo, es un ejemplo perfecto de la forma de gobierno disfuncional de Haití que ha disuadido a la inversión extranjera directa.
Como informó “Time”, “gracias a la acritud entre el Presidente y el Parlamento, Haití se encontró sin un Primer Ministro - que dirigiese el Gobierno y por lo tanto, supervisase el desembolso de fondos para la recuperación tras el terremoto - durante más de seis meses después de que Martelly jurase su cargo el pasado mes de mayo.
Durante ese tiempo, los donantes internacionales, nerviosos, retuvieron miles de millones de dólares para proyectos de reconstrucción”
Por otro lado, como informó nuestra publicación, los líderes haitianos dicen que el Gobierno nacional se ha visto obstaculizado debido a que las organizaciones no gubernamentales creen que son más eficientes para gestionar los esfuerzos de cooperación haitianos.

Seguridad 

La seguridad fue una cuestión que impidió la implementación exitosa de los cooperantes por un informe de The Guardian días después del terremoto que advertía que “el esfuerzo de cooperación caótico y confuso está costando vidas”, como el choque entre los esfuerzos de Estados Unidos y de Naciones Unidas.
EEUU desplegó 22.000 soldados a Haití en el período inmediatamente posterior a la catástrofe, y la ONU, en última instancia, proporcionó una fuerza de paz de 10.500 miembros.
Esta fuerza ya superó su etapa de bienvenida, y como informó Reuters en febrero, “ha ido aumentando el malestar público sobre el papel de la ONU en Haití después de las recientes denuncias de violación que implican a los soldados paquistaníes, además de una ira creciente por una epidemia mortal de cólera en 2010 vinculada la fuerza de mantenimiento de la paz, conocida como MINUSTAH.
Mientras tanto, los ex soldados haitianos han acudido a bases militares abandonadas para presionar a Martelly para que restablezca el Ejército, disuelto en 1995, preocupando todavía más a los donantes internacionales.
Este tema nos da una pista acerca de cómo debería haberse producido la distribución de ayuda.
Si Naciones Unidas o un contratista adecuado no pueden proporcionar la seguridad adecuada, es posible que no importe lo bien organizadas que estuvieran el resto de las actividades de cooperación de Haiti.

Magnitud 

El tamaño de la población afectada por el terremoto en Haití fue suficiente para complicar la misión humanitaria. USAID informó que el terremoto desplazó a 1,5 millones de personas y golpeó violentamente a toda el área metropolitana de la capital haitiana de Port-au-Prince.
Además, debido a los grandes daños causados a los registros administrativos, tales como los títulos de propiedad, generaron disputas por la propiedad de tierras o por su verificación, que son un obstáculo importante para avanzar en la construcción de viviendas.
Un seguro internacional o un registro digital basado en la web hubieran evitado la pérdida de esta información.

Enfermedades 

De acuerdo con los Centros para el Control de Enfermedades (CDC), un brote de cólera vino a añadir una complicación más a los esfuerzos de cooperación en Haiti.
Una investigación de los CDC no encontró que los trabajos de cooperación fueran los responsables de causar el cólera, pero el brote significaba una variable adicional que se añadió a la ya fatigada ayuda de cooperación y a sus esfuerzos.
Un plan de acción de emergencia con más cohesión que incluyese la reconstrucción temprana de la infraestructura sanitaria habría detenido la propagación del cólera con más eficacia y habría reducido complicaciones relacionadas con la asignación de recursos. 


Logística
El terremoto en Haití generó varias cuestiones logísticas inmediatas, según los datos publicados por AlertNet. Por ejemplo, grandes cantidades de escombros de los daños provocados en los edificios en una zona densamente urbanizada obstaculizó el transporte de los suministros de emergencia.
También según Thompson Reuters, la escasez de espacio del aeropuerto limitó el número de aviones de apoyo que podrían ser desembarcados en el mismo momento. Para empeorar las cosas los barcos de la Guardia Costera enviados a Haití para la evacuación sufrieron problemas mecánicos según el Centro para la Integridad Pública.
La limpieza de los escombros estancó el proceso de reconstrucción durante todo el primer año después del terremoto, aunque el segundo año ha sido mucho más productivo.
Para cualquier actividad de cooperación en beneficio de los necesitados, es necesario reducir trabas burocráticas, jurídicas y administrativas u otros obstáculos.
Para que este proceso tenga éxito, el pueblo haitiano también debe estar seguro de que el esfuerzo de cooperación no es una operación política orquestada para infiltrarse en la infraestructura del país.
La coordinación de los grupos de cooperación tanto nacionales como extranjeros en materia medioambiental, logística, de información y de suministros es esencial para mejorar las operaciones de emergencia.
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