Acaba en Nueva York la cumbre contra la pobreza. Recogen los funcionarios sus carpetas. Termina este absurdo frenesí de burócratas y mandatarios en apabullantes todoterrenos con cristales ahumados.
Se queda triste y sola la madre africana con el niño en brazos, inmotalizada en el cartel a la entrada de la ONU donde puede leerse: “Podemos acabar con la pobreza en el 2015”.
¿Nos lo creemos?
“Nunca podremos proclamar “victoria” contra la pobreza”, nos reconocía la economista del MIT Esther Duflo, tirando a escéptica con los así llamados “objetivos del milenio”. “Podemos en todo caso mitigar el hambre, reducir la mortalidad infantil, procurar el acceso al agua potable, combatir las epidemias, disminuir el número de gente que vive con menos de un dólar al día... Acabar con la pobreza es un impulso natural y humano. Pero siempre habrá pobres, y habrá pobreza”.
“El fin de la pobreza” da título al libro de Jeffey Sachs que fijó esta meta loable y utópica. Pero basta una incursión en Haití o en el Africa subsahariana para comprender que la tarea es de una dimensión sobrehumana. Para acabar con la pobreza habría que acabar antes con la avaricia, con la corrupción y con las brutales desigualdades, y eso no es algo que pueda conseguirse en cinco, diez o quince años.
¿Qué sentido tiene pues insistir en los “objetivos” para el 2015? ¿Para qué convocar en Nueva York a los dirigentes de 140 países y a toda una legión de burócratas y “profesionales” de la pobreza? ¿Cómo pueden marcar la diferencia las ONGs y la gente de a pie en medio de este laberinto sin salida?
Poco se puede hacer, realmente, en este anacrónico “palacio” de cristal de la ONU que se desmorona ante nuestros ojos. Se cierra pues la “cumbre” de la pobreza ante el escepticismo general, en medio de la recesión y con el goteo aplastante de datos y más datos que nos recuerdan lo mucho que nos queda:
.1.400 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día.
.La crisis económica empujará a más de 64 millones de personas al precipicio de la pobreza extrema a finales del 2010.
.Más de 830 millones de personas pasan hambre.
.5.500 personas mueren al día de sida y 7.400 resultan infectados.
.884 millones de personas no tienen acceso al agua potable y la mitad de población de los países en desarrollo (2.600 millones) no disponen de los servicios básicos de saneamiento.
.350.000 mujeres fallecen todos los años por complicaciones en el parto o durante el embarazo.
.Nueve millones de niños mueren anualmente antes de alcanzar los cinco años.
Foto: C.F.
http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/cronicasdesdeeeuu/2010/09/23/podemos-de-verdad-acabar-con-la-pobreza.html
Abrimos este espacio en 2007 cuando en Haití se hablaba también español debido a la presencia de los soldados latinos de la MINUSTAH. Una ventanilla de expresión hispánica para verse mejor . Después del 2010, el mundo hispano se ha acercado bastante a Haití. Sirvio para darse cuenta del distanciamiento de sus vecinos de culturas hispanas casi todas. Esta sigue abierta para recibir todos aquellos que quieran entender y ayudar a esta nación patrimonio de la humanidad.
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