Puerto Príncipe, 17 jun (PL) Un alto mando de los exmilitares amotinados en Haití desde inicios de año descartó la posibilidad de deponer las armas y amenazó con lanzar una operación para romper las cadenas que atan al jefe de Estado.
El exoficial Marcel Daniel sostuvo que ni él ni sus hombres prevén abandonar la movilización para exigir la reinstauración del Ejército, según informó hoy el diario digital Haiti Libre.
Daniel anunció que antes del fin de año escolar "una respuesta será dada a la comunidad internacional", por criticar la reconstitución del poder militar en el país caribeño.
Integrantes de las desaparecidas Fuerzas Armadas Naciones de Haití (FADH) tomaron desde enero pasado antiguas zonas militares en la periferia capitalina, de las que se negaban a partir, pese a las órdenes del presidente Michel Martelly.
Miles de ellos marcharon a mediados de mayo pasado por esta capital y por Cabo Haitiano (norte) para exigir la reinstauración del Ejército, una manifestación que dejó al menos dos heridos, unos 50 detenidos y un caos generalizado en las ciudades más importantes del país.
Tras el incidente, las fuerzas dela ONU y de la policía nacional los obligaron a desalojar los campos.
Los exsoldados demandaron inicialmente una indemnización por 15 millones de dólares para compensar sus pérdidas tras la desaparición de las fuerzas armadas, hace 18 años.
Sin embargo, cuando el Gobierno accedió al pago de la suma, los exuniformados la rechazaron y dijeron que solo quedarán satisfechos cuando se restaure el poder militar.
Las FADH estuvieron formadas por unos ocho mil hombres y fueron disueltas en 1994 por el exmandatario Jean Bertrand Aristide, tras ser artífices de numerosas violaciones de los derechos humanos y golpes de Estado.
Martelly ordenó en noviembre pasado la creación de una comisión civil que se encargaría de gestionar el restablecimiento del poder militar, lo que actuó como polvorín para el levantamiento de los exmilitares.
El programa contempla la contratación de un primer contingente de tres mil 500 efectivos y una inversión a largo plazo de 95 millones de dólares.
oda/lio
El exoficial Marcel Daniel sostuvo que ni él ni sus hombres prevén abandonar la movilización para exigir la reinstauración del Ejército, según informó hoy el diario digital Haiti Libre.
Daniel anunció que antes del fin de año escolar "una respuesta será dada a la comunidad internacional", por criticar la reconstitución del poder militar en el país caribeño.
Integrantes de las desaparecidas Fuerzas Armadas Naciones de Haití (FADH) tomaron desde enero pasado antiguas zonas militares en la periferia capitalina, de las que se negaban a partir, pese a las órdenes del presidente Michel Martelly.
Miles de ellos marcharon a mediados de mayo pasado por esta capital y por Cabo Haitiano (norte) para exigir la reinstauración del Ejército, una manifestación que dejó al menos dos heridos, unos 50 detenidos y un caos generalizado en las ciudades más importantes del país.
Tras el incidente, las fuerzas de
Los exsoldados demandaron inicialmente una indemnización por 15 millones de dólares para compensar sus pérdidas tras la desaparición de las fuerzas armadas, hace 18 años.
Sin embargo, cuando el Gobierno accedió al pago de la suma, los exuniformados la rechazaron y dijeron que solo quedarán satisfechos cuando se restaure el poder militar.
Las FADH estuvieron formadas por unos ocho mil hombres y fueron disueltas en 1994 por el exmandatario Jean Bertrand Aristide, tras ser artífices de numerosas violaciones de los derechos humanos y golpes de Estado.
Martelly ordenó en noviembre pasado la creación de una comisión civil que se encargaría de gestionar el restablecimiento del poder militar, lo que actuó como polvorín para el levantamiento de los exmilitares.
El programa contempla la contratación de un primer contingente de tres mil 500 efectivos y una inversión a largo plazo de 95 millones de dólares.
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